Por Ing. Guillermo Méndez Salgado
La ciudad de Tepic padece un vergonzoso problema que parece no importar, desniveles y obstáculos en las banquetas destinadas para el paso peatonal, se construyen con escalones, rampas, y lo que se nos ocurra a capricho y necesidades de particulares. Emulan al video juego “mario Bros”, donde el personaje corre, brinca y camina sorteando obstáculos so pena de caer si falla; en la vida real el peatón debe sortear obstáculos con el riesgo de sufrir un accidente que puede ser fatal si tropieza o resbala; los adultos mayores y las personas con alguna discapacidad física simplemente no pueden circular por la mayoría de ellas.
El Articulo 81 y 82 del Reglamento de Construcciones y Seguridad Estructural para el Municipio de Tepic, y la Ley de Asentamientos Humanos y Desarrollo Urbano para el Estado de Nayarit en sus artículos 151 Fracc.VI, 153 Fracc. V, 156 Fracc. IV, establecen los requisitos y potestades de las banquetas, y garantizan la operatividad de éstas. Si está reglamentado, porqué tenemos un desorden en ellas. Colonias enteras están plagadas de este desagradable y peligroso problema. Como prueba de ello, los invito a que caminen por la calle Gustavo Baz entre la loma y la calzada afuera del SIAPA; se van a topar con lo que se inimaginable. Estamos hablando de una banqueta de hospitales y edificios públicos; no hablo de los vendedores ambulantes todavía por cierto.
En Tepic muchas personas tienen la errónea creencia que la banqueta les pertenece y no es así, es parte de la vía pública; aun cuando se haya construido con su dinero, ello no le acredita su propiedad. Muchos la toman para sí y le indexan de forma ilegal, traumas, aberraciones y caprichos arquitectónicos; rampas monumentales, escalones, cambios de nivel para dar acceso cómodo a cocheras o entradas; claro, sin afectar hacia adentro de la propiedad. Algunas son recubiertas con azulejos
resbaladizos que las convierten en pistas de hielo cuando llueve, lo importante es que “armonice” con la fachada. Como ejemplo podemos ver dos casos que rayan en lo absurdo, uno en la recién construida Avenida Bellavista entre Calle Plátano y Naranjos donde hace dos años un particular para dar acceso a la segunda planta de su “malecha” edificación, construyó una escalera en plena banqueta. Otro en plaza galerías en Cd del Valle por la calle Paseo de Hamburgo, donde el restaurant “café del chef” se apropió de la banqueta amurallándola, y obligando a las personas de plano a caminar por el arroyo vehicular poniendo en peligro a todos los que requieran pasar por ahí. Sin dejar de mencionar la rampa de acceso al mismo estacionamiento de la plaza que arranca en el área de banqueta; todo ante la complacencia de las autoridades. Crecer el cancel de la reducida cochera invadiendo la banqueta y para que el nuevo coche quepa, es un deporte muy practicado en Tepic; no hay colonia que no tenga un ejemplar de estos. De los vendedores ambulantes, de postes, letreros o autos estacionados sobre ellas, mejor ni hablamos por que no acabamos.
Es lamentable que nos hayamos acostumbrado a esta anarquía donde cada quien hace lo que quiere, que nos parezca normal y que las autoridades no hagan nada. A pesar de que el primer cuadro de la ciudad se modernizó y casi eliminó de tajo todo eso, nuevas y modernas construcciones que se hacen en Tepic aun contienen esas aberraciones medievales; Es el cuento de nunca acabar.
Con los ya no tan nuevos estándares de movilidad incluyente implementados en todo el mundo, La DGDUE debiera endurecer la supervisión y evitar que se continúen haciendo barbaridades. Llevar ese modelo a toda la ciudad; es decir una banqueta amplia cómoda y segura para todos es lo menos que merecemos
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